LA FISIOLOGIA DEL FRIJOL BAJO CONDICIONES DE SEQUIA

Resumen

 El frijol (Phaseolus vulgaris L.) tiene una pobre reputación como cultivo, tanto por su bajo potencial de rendimiento como por su escasa tolerancia al estrés causado por sequía, excesos de agua o salinidad. Las limitaciones ambientales, como la escasez de humedad, restringen severamente la producción de este cultivo en zonas de baja precipitación. Tal es el caso del Altiplano del Centro-Norte de México, región donde se cultivan anualmente más de un millón de hectáreas de frijol con rendimiento promedio de 300 kg/ha, lo que representa más del 60% del total de la superficie sembrada en el país con este cultivo y poco menos del 50% del volumen total de producción. Algunas de las opciones que se han propuesto para aumentar la productividad del frijol bajo condiciones de sequía, han sido la selección  y mejoramiento de variedades adaptadas a esas condiciones de baja precipitación, y la generación de prácticas de manejo orientadas a incrementar la captación y retención de agua en el suelo. No obstante, los mecanismos fisiológicos de la planta relacionados con su adaptación a condiciones de sequía, que además varían entre zonas agroclimáticas, no son bien conocidos. Por ejemplo, los programas de mejoramiento genético han basado la selección de materiales en aquellos genotipos que alcanzan un mayor rendimiento en un ambiente y tiempo dados; sin embargo, en la zona semiárida tanto la distribución de lluvias como la humedad disponible en el suelo varían considerablemente de un año a otro y de una región a otra. Esta variabilidad, cuando se seleccionan genotipos únicamente en base a rendimiento de grano, promueve la elección de material genético con un comportamiento medio, lo que implica una menor capacidad de manifestar un alto potencial de rendimiento en ambientes específicos. Para identificar, dentro de la amplia variabilidad genética para frijol que se tiene
disponible en México, los genotipos con alto potencial de rendimiento bajo condiciones limitantes de humedad, se requiere de un
entendimiento claro de la interacción de las condiciones de clima y suelo con los procesos fisiológicos que determinan y regulan la expresión del rendimiento bajo esas condiciones. El enfoque que se pretende dar en los estudios de Fisiotecnia relacionados con sequía en frijol, es a nivel de cultivo donde se integren los caracteres fenológicos, morfológicos, fisiológicos y bioquímicos que, bajo diferentes condiciones agroclimáticas, indiquen los mecanismos de adaptación que permiten a la planta obtener una óptima acumulación de materia seca y un máximo potencial de rendimiento.